Octavos de Final

Antes de la crónica del Asesor Pirincho, les dejamos un video de lo que fueron las elecciones del pasado jueves. Muchas gracias a nuestro reportero Gastón Soler.

 

Octavos de final (Por El Asesor Pirincho)

 

Era, definitivamente, una linda noche para ver fútbol. Con la excusa de las elecciones del PFE los jeques encomendaron a este cronista cubrir los octavos de final, con especial atención al enfrentamiento de dos elencos duros: la Furia de la legendaria “Araña” Muras y la goleadora y goleada Argentina de Romero, el as de la parrilla.

 

Luego de presenciar la función de gala de los alemanes, que aplastaron sin miramientos a Uruguay luciendo juego asociado, solidez defensiva y hasta una sensacional patada de taco del volante tapón Maritato (“si la hacés, hacela con estilo”, sentenció un plateísta), los equipos se dispusieron y Claudio pitó el comienzo. En el primer tiempo los palos y algunas oportunidades marradas por los españoles hicieron que comenzaran cayendo ante la mayor efectividad de Argentina, hasta que el partido se rompió por una falta innecesaria del 22 ibérico, que fue respondida en el acto por un manotazo del capitán Romero, con roja automática para ambos. Con cuatro jugadores cada uno y el lógico cansancio, se abrieron los espacios en el complemento y los argentinos lograron desequilibrar, para ser siempre igualados o seguidos de cerca por la Furia. Hasta que los españoles lograron el empate y el ánimo gaucho pareció derrumbarse. Y más afloraron los nervios y las recriminaciones al árbitro (que le valieron la tarjeta azul al goleador argentino) cuando los rojos lograron el buscado 7-6, con que finalmente pasaron a cuartos de final.

 

Mientras la multitud reventaba las urnas bajo la atenta mirada de los fiscales Mora y Van der Heyden, llegaban las noticias de la gran remontada de Bélgica y la buena victoria de Nigeria ante los lusitanos.

 

Luego, recobrando fuerzas con una merecida bondiola, este cronista tuvo el gusto de presenciar el emocionante choque por la Milk Cup entre el México y la Inglaterra de los ex esposos Bitz y Busso. Fue, realmente, un partido memorable: en el primer tiempo los británicos aprovecharon el desconcierto del team azteca, el buen partido de Basso y las pinceladas de Villagrán despachándose con un comienzo arrollador, llegando a ponerse 4-0 arriba y hasta a pegar algunos tiros más en los postes. Pero luego los de Bitz –que al fin y al cabo tienen grandes jugadores como Fedi, Javi Álvarez, Hume o Bitz– comenzaron a llevarlos contra su área y a descontar peligrosamente. Por momentos los ingleses lograban salir de contragolpe con criterio, y por momentos incurrían también en espeluznantes desatenciones defensivas. Así, con la muchedumbre fluyendo hacia la cancha 3, comenzó en el complemento un verdadero espectáculo en el que hubo de todo: goles en contra, golazos, griterío, grandes atajadas de los goleros, grandes cagadones de los goleros, palos, travesaños, una enfermería (Villagrán, Villar, Javi Álvarez, Madrid) y hasta un gol de goleador de Busso que hizo recordar a Lineker (Roberto José Lineker). Con México igualando el marcador y el golero Madrid lesionado en el peor momento posible, las cosas parecían negras para los británicos; para colmo, un tocado Hernán Villar se calzó los guantes (¿dónde está Barbero?) para sufrir el sexto gol de los aztecas tras una jugada preparada. Pero, a minutos del final, un desafortunado gol en contra de los mexicanos colocó nuevamente a los de Busso en partido: el árbitro pitó el final y un cotejo que tuvo todos los condimentos posibles se encaminó, por si fuera poco, hacia los primeros penales del año.

 

Mientras los fiscales realizaban el esperado conteo de los votos, los espectadores se apilaban en torno del arco de Luis María Campos. Evocando a su mítico ancestro Inglaterra 2014, los británicos fueron implacables desde los doce pasos, en tanto que en México sólo acertó “Ozil” Álvarez: Fedi rompió el travesaño y Borgese tiró la pelota a la unidad básica. Eufóricos, los ingleses todavía festejaban mientras la comisión anunciaba el triunfo electoral de Maxi Blanc, “Ducha” Della Santa y Fede Bitz.

 

Cuando este cronista se alejaba del predio, llegó a escuchar algunos rumores inquietantes en Suecia. Al parecer, al capitán Re le faltó un solo voto para ser elegido: el voto del lesionado “Pampa” O’Gorman, que en una decisión inexplicable no concurrió al acto eleccionario –según las malas lenguas, vengándose de aquella triste ocasión en la que el capitán le pidió que devolviese la gloriosa camiseta sueca. Así, entre chisme, habladurías, dimes y diretes, se cerró una noche digna de Italia 90, con atmósfera de play-off: mucha pierna fuerte, muchas emociones, muchas tarjetas, mucho cronómetro, lesionados por doquier, pelotazos a los vecinos y, quién sabe, hasta acaso alguna mano negra.